Un reciente reportaje publicado por Morning Brew ha revelado una preocupante tendencia en Estados Unidos: el cierre masivo de farmacias. SSegún el informe, durante 2024 cerraron 186 farmacias solo en Nueva York y, a nivel nacional, el ritmo de clausuras es de aproximadamente 10 farmacias por día. Esta situación ha dejado a muchas comunidades, especialmente en zonas rurales, sin acceso fácil a medicamentos y atención farmacéutica, generando lo que ya se conoce como "desiertos de farmacias". Uno de los factores más determinantes en la desaparición de farmacias en EE.UU. es el impacto de los Pharmacy Benefit Managers (PBMs). Originalmente creados para procesar reclamos de farmacia y negociar precios más bajos con los fabricantes, los PBMs han evolucionado hasta convertirse en intermediarios poderosos con un enorme control sobre el mercado farmacéutico. Hoy en día, los PBMs manejan el sistema de reembolsos y tarifas de las farmacias y, en lugar de reducir los costos, han provocado un aumento en los precios de los medicamentos, limitando además los ingresos de estos establecimientos. Estas entidades controlan aproximadamente el 70% del mercado y se han integrado verticalmente con aseguradoras y grandes cadenas de farmacias, asegurando que sus beneficios aumenten a expensas de los farmacéuticos independientes y las cadenas minoristas. Disminución de reembolsos y aumento de tarifas Beneficio directo del aumento de precios Dominio del mercado CVS se encuentra en una posición diferente a sus competidores debido a su integración con su propio PBM, CVS Caremark. Al comprar Caremark en 2007 y la aseguradora Aetna en 2018, CVS logró asegurarse un control casi total de la cadena de suministro de medicamentos. Aunque esto le permite mantenerse a flote, también ha contribuido a que otras farmacias sean empujadas fuera del mercado. Por otro lado, Walgreens y Rite Aid, que no tienen su propio PBM, han sufrido enormes pérdidas debido a la presión de estas entidades. Walgreens reportó una pérdida de 8.6 mil millones de dólares en 2024 y Rite Aid se declaró en bancarrota en 2023, en parte por los efectos de los PBMs en su modelo de negocio. La creciente influencia de los PBMs ha llevado a un llamado a la regulación. Algunos estados han implementado leyes para limitar su poder, pero el problema requiere una solución a nivel federal. Hay un creciente apoyo bipartidista en el Congreso para reformar la industria de los PBMs, y figuras políticas han expresado intenciones de regular o eliminar su papel como intermediarios. Si no se toman medidas, es probable que las farmacias independientes y muchas cadenas sigan desapareciendo, dejando a millones de estadounidenses con menos acceso a medicamentos esenciales. El futuro de la industria farmacéutica en EE.UU. depende en gran medida de si se logra limitar el poder de los PBMs y devolver el control de los precios a las farmacias y los consumidores. Introducción
El papel clave de los PBMs en la crisis de las farmacias
Cómo los PBMs están afectando a las farmacias
Los PBMs reducen los montos que las farmacias reciben por surtir recetas, haciendo que en muchos casos estas pierdan dinero al vender medicamentos esenciales.
Al actuar como intermediarios entre los fabricantes de medicamentos, las aseguradoras y las farmacias, los PBMs logran quedarse con un gran porcentaje de las ganancias, incentivando precios más altos en lugar de costos accesibles para los consumidores.
Empresas como Express Scripts (propiedad de Cigna), OptumRx (propiedad de UnitedHealthcare) y Prime Therapeutics (propiedad de Blue Cross Blue Shield) controlan la mayoría del mercado, limitando la competencia y dificultando que farmacias independientes puedan sobrevivir. El caso especial de CVS y su relación con los PBMs
El futuro de las farmacias en EE.UU. y posibles soluciones
Fuentes:
Why Are So Many Pharmacies Closing? (Morning Brew, Youtube) US FTC finds major pharmacy benefit managers inflated drug prices for $7.3 billion gain (Reuters)